Las brujas de Jeru-Salem Autor: Hilel Resnizky

[Jayme Fucs Bar]

Las brujas de Jeru-Salem Autor: Hilel Resnizky Si usted tuviese un enemigo, alguien como Ahmadineyad, le tomaría una foto y le clavaría (a la foto) un alfiler en el corazón o buscaría una buena arma de fuego o un buen abogado. Si tuviese de pronto una puntada en el pecho, trataría de recordar quien lo miró por la ventana la víspera de sábado al mediodía o consultaría con su médico. Quien cree en las primeras alternativas, cree en brujas y en brujerías, lo que dice mucho acerca de su inteligencia y su intelecto. Por mi parte diría que si alguien se empecina en creer en algo incierto sería mejor quien crea en el pronóstico del tiempo (o por la fecha, en los Reyes Magos). Por ahora, anótese lo que dice el Deuteronomio en el capitulo 18: “No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego ni quien practique adivinación, ni agüero, ni sortilegio, ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos” (versículos 10, 11). Quiero establecer que la creencia en brujas no sólo está en contra de la inteligencia. El caso es peor. Porque si alguien cree que sus problemas son producto de brujerías, ello le impide averiguar su origen real. El mal estado de la cañería es la causa de la humedad en las paredes y el exceso de grasas es el motivo de su ardor de estómago. Ocúpese de eso. Un detalle autobiográfico: cuando tenía ocho años, una curandera me rodeó el estómago con una cinta de medir y me “curó” el “empacho” (indigestión). A decenios del suceso, me permito suponer: 1) que no tenía “empacho”, y 2) por lo tanto, la curandera no me lo curó. Como alargo de mi ciencia, me permito dudar. La creencia en brujas puede ser peligrosa. Para las brujas y para los creyentes. Como lo comprobaron los residentes en la ciudad y el pueblo de Salem y otros poblados en Massachusetts entre l692 y 1693. Todo empezó con dos chicas de nueve y once años que sufrían ataques inexplicables que comprendían alaridos, convulsiones, arrojo de objetos, expresiones incomprensibles. Un médico que las examinó no encontró males reales. Hay quien busca hoy causas reales: 1) histeria, como reacción ante los ataques de los indios y 2) ingestión de pan infectado por el hongo Claviceps Purpurea, el mismo del cual hoy se elabora el LSD. Hoy hay quienes suponen que se trató sencillamente de simulación para obtener la atención. Como no se encontraron causas reales (si la última explicación es la correcta era imposible) comenzaron juicios por “brujería” (witchcraft). ¿Qué diría usted si enjuician a su vecino por “mal de ojo”? Debe quedar en claro: los magistrados eran legales, los procedimientos eran losprescritos, las notas eran correctas, sólo que se trataba de un delito imposible e inexistente, por el cual se pidió y se obtuvo la pena capital. Más de 150 personas fueron enjuiciadas, 26 fueron convictas, 19fueron ahorcados, por lo menos seis murieron en prisión. A Giles Corey, que se negó a confesar, le pusieron piedras pesadas en el pecho hasta su muerte al cabo de dos días. En toda investigación policial una pregunta básica es “cui bono”, ¿quien se beneficia? Elemental, Watson. Satanás. En el trasfondo de la caza de brujas estala creencia(la Fe) en el Diablo. Todo fue criminalmentelegal y basado en una concepción dicotómica, dualista en la contradicción entre Dios y Satán. Pero Satán es inaccesible. Aquellos a quienes invisten de la responsabilidad y de la culpa son seres humanos. En el conflicto entre las potencias opuestas: el Bien Absoluto y el Mal Absoluto, los que sufren las consecuencias del conflicto son seres humanos, por su supuesta complicidad con el Mal. Los juicios de Salem son hoy una metáfora del ejercicio de las instituciones legales para ejecutar una injusticia real. Los juicios de Salem son parte de un fenómeno más amplio: la caza de brujas que aconteció en Europa y América entre los años 1480 y 1760. En su transcurso fueron ejecutados entre 40.000 y l00.000 brujos (la mayoría brujas, ¿interesante, no?). El juicio a las brujas fue anulado por ley en Gran Bretaña, recién en 1736. Como soy un ciudadano orgulloso del CercanoOriente,no puedo dejar de mencionar que en nuestro Código de Hammurabi, la ley dos,trata del tema. De acuerdo al inciso, el acusado de brujería es arrojado al río (el Eufrates). Si el Eufrates lo devuelve su acusador es arrojado a las aguas. En este caso los magistrados son remplazadospor el río, al cual consideran Dios. Es un sistema tan legítimo como el de Salem, aunque favorece a los practicantes de natación. En Occidente hace yacasi cuatro siglos que no se cazan brujas. No así en Afro-Asia. Para darun país, por ejemplo, en2005 Fawza Falih fue acusada en Arabia Sauditade haber causado la impotencia de un hombre (usted de que se ríe). Fue ejecutada en 2009. En India hay de 150 a 200 “brujas” asesinadas por año. Pero como sabemos, India es un país del espíritu. En nuestra época se llamó “caza de brujas” a un fenómeno político que se inició en l950 en Estados Unidos. El actor principal era el senador Joseph McCarthy .Pero McCarthy no actuó en el vacío. En l945 había concluido la Segunda Guerra Mundial, en la cual las dos superpotenciashabían sido aliadas. A partir de entonces la URSS, acaudillada por Stalin, se había apoderado de Europa Oriental y en 1947 había estallado la Guerra Fría. En China, en 1959, el comunismo había completado su revolución. En l950 había comenzado la invasión de Corea del Norte, ayudada a partir de l951 por China a Corea del Sur. La división del mundo en campos antagónicos era un hecho. No una invención del senador McCarthy. Su contribución especial fue el descubrimiento de los cómplices de Satán: los comunistas, y sobre todo los comunistas embozados que a su modo de ver se habían infiltrado en puestos clave del equipo gubernamental y en la cultura americana. En un discurso el 9 de febrero de 1950aseguró tener en sus manos losnombres de un númerode agentes comunistas. El número es impreciso porque no hay copia del discurso. Lo importante para él era establecer que el Departamento de Estado estabacopado por los comunistas, luego de que el Partido Demócrata estaba en el poder 20 años. De 159 nombres mencionados por McCarthy a lo largo de su actuación, hubo pruebas en contra de nueve. La caza de brujas llegó también por otro conducto a Hollywood, donde se confeccionó la lista negra de los guionistas, actores y directores, para ser acusados y alejados. Julius Rosenberg y su esposa Etehel fueron condenados por espionaje y ejecutados en l953. Fue la primera ejecución por espionaje de civiles estadounidenses, a pesar de que Julius era realmente un agente ruso; otros espías no sufrieron su suerte. En una editorial 50 años más tarde el New York Times habla desu muerte como consecuencia de la histeria. Histeria que McCarthy había contribuido a crear. El McCarthysmo se había transformado en una fuerza de depresión, de acusaciones sin base, de terror político. Eisenhower fue electo presidente como candidato republicano pero no colaboró con McCarthy. Enceguecido por su pasión, McCarthy veía espías comunistaspor todas partes. En un momento los buscó también en las Fuerzas Armadas. Era demasiado. El 2 de diciembre de l954 el Senado lo condenópor abrumadora mayoría, que incluía también amiembros de su partido, el republicano. Un juez de la Corte Suprema norteamericana, designado por el republicano Eisenhower fue el que calificó la campaña de McCarthy como “caza de brujas”, no fue el único.  Aparte de su campaña en contra de los pretendidos comunistas, McCarthy actuó en dos tópicos principales: apoyó la Ley Taft Hartley, destinada a limitar la libertad de acción de los sindicatos, y pidió conmutar la pena de muerte a un grupo de miembros de laSS,acusados de haber asesinado a prisioneros de guerra estadounidenses. El argumento que adujo McCarthy fue la debilidad de las pruebas en contra de los nazis. En el caso de McCarthy resulta irónico. Es importante subrayar que la debilidad del McCarthysmo no estriba en la oposición acerba al comunismo y a la URSS, que en ese momento histórico estaban en conflicto con los Estados Unidos, sino en la demagogia, la ligereza, la falta de seriedad y de responsabilidad con que agredió a los “sospechosos”. Ejemplifico: Charlie Chaplin, el de “El gran dictador” no pudo volver a Estados Unidos, perseguido por algún secuaz de McCarthy. Mc Carthy -y sus adeptos- transformaron toda disensión en traición, toda diferencia de opinión en falta de patriotismo. Luego de haber sido un astro en la política yanqui, su extremismo lo condenó al aislamiento en que pasó la última etapa de su vida: El “patriota” se había transformado en un estorbo. Si en el conflicto con la URSS se presentaba a Estados Unidos como defensor de la democracia, era difícil presentar credencialescon un “demócrata” al estilo McCarthy. Hace unos días una mayoría de la Knéset aprobó la creación de una comisión investigadora que se ocupe de distintos organismos que vigilan la democracia israelí. Con la misma mayoría -y los mismosderechos-podrían haber resuelto que “dos y dos son cuatro, cuatro ydos son siete y siete: dieciseis”.  Tienen mayoría. Claro. Son organismos de izquierda: “El Comité por los derechosciviles”, “Médicos en pro de los derechos humanos”. Un momento. Si alguien defiende los derechos del prójimo, ¿es izquierdista automáticamente? ¿Beni Beguin es izquierdista? Como diría el difunto McCarthy: “Hay izquierdistas solapados”. Como Rafi Walden, de los médicos izquierdistas, que es teniente coronel de reservas en Tzáhal. Un ejemplo más humilde de los agentes secretos anti israelíes que disimulan su verdadera identidad puedo ser yo, que pasé el curso de paracaidismo y participé en todas las guerras, desde mi aliá, hasta la Primera Guerra del Líbano. Luego de volver de la misma me citaron a un domicilio que desconocía, allí alguien me explicóque me retiraban del servicio porque “A tu edad, cómo te podemos enviar al Líbano”. Le expliqué que había pasado unas semanas de turismo en un pueblito aleste del Líbano. Los distinguidos congresales no tienen el monopolio del patriotismoasí como no lo tuvieron Mc-Carthy y sus compinches. ¿Por qué la crítica es automáticamenteanti patriótica? Si usted tira al blanco alguien lo corrige; más a la izquierda, más a la derecha, ¿usted lo ve como una agresión? ¿Como falta de amistad? Ustedno piensa que ojos avizores puedenevitar,no solo la muerte de árabes inocentes (¡sí, hay árabes inocentes!), sino también la de soldados israelíes. La mitad de nuestros muertos en guerra son víctimas del fuego enemigo. La otra mitad son víctimas de diversos accidentes, incluso lo que se da en llamar “fuego amistoso”. ¿A usted le gusta esaamistad? Pero aun más; las víctimas “correctas” de la guerra, las ocasionadas por el fuego enemigo, ¿no podrían ser ahorradas con otra política? Hay que reconocerlo, hay entre nosotros quienes no siempre están de acuerdo con Netaniahu. ¿Sólo la derecha puede expresar su opinión ? ¿Y si hay quien piensa que Barak está equivocado? Estimados congresales. No sé si creen en Dios o creen en el Diablo, como los funcionarios de Salem. La disensión no es sólo un derecho. Asegurar el derecho a disensiónes un deber de toda democracia. El fascismo, el estalinismo, no admiten derechoa disensión. ¿Alguien desea para Israel alguno de esos regimenes? ¿Usted está por Jeru-Salem o por Jerusalem?