Dos soldados de la Brigada Kfir fueron llevados ante un tribunal militar tras quemar una bandera palestina que confiscaron, cerca de una aldea árabe del norte de Cisjordania (Judea y Samaria).
Una investigación preliminar del Ejército de Defensa de Israel (Tzáhal) determinó que, al inspeccionar un automóvil, los soldados confiscaron una bandera palestina y la quemaron. Luego, la arrojaron a unos arbustos cercanos.
El puesto de control está manejado por cuatro soldados, pero solamente dos fueron llevados a una corte marcial y
disciplinados. El comandante de escuadrón fue relevado de su rol de comandancia y condenado a 20 días de prisión. Otro soldado fue confinado a su base por 28 días.
Un oficial destacó que la investigación fue llevada a cabo en el terreno porque los soldados actuaron aparentemente en contra del protocolo.
El portavoz militar señaló que “la investigación preliminar dejó en claro que se trató de un incidente inusual y que los soldados actuaron en contra de lo que se espera de ellos y en contra de las órdenes de los comandantes”.
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